Me gusta este mes porque es de comienzos. En diciembre toca hacer repaso del año y empezar un nuevo ciclo. O continuarlo, depende de cada uno.
El solsticio de invierno está a la vuelta de la esquina. Estamos en los días más oscuros del año y es un buen momento para plantar la semilla de aquello que queremos que se manifieste en primavera. Lo comentamos el otro día en el directo en Intagram con Patricia, de El viaje de Iris: estos días toca vivir más hacia dentro, aunque todo lo de fuera nos invite a lo contrario.
Es curioso cómo tenemos que ir a contracorriente a veces para poder encontrarnos. Justo cuando hay que estar más tranquilo es el momento en el que todo parece invitarnos a un no parar constante. Las navidades, los encuentros, las reuniones y todo lo que conllevan estas fiestas no nos ponen fácil plantar nuestra semilla y cuidarla para que crezca porque para eso necesitamos paz y la paz no está ahí fuera. La pregunta es ¿tú estás listo para nadar a contracorriente?
Ir en el sentido contrario, salirme de la autopista para continuar por la carretera comarcal, ha sido uno de los mayores aprendizajes de mi vida. Estoy hablando en sentido figurativo, claro, Y, aunque al principio me costó, ahora soy mucho más feliz disfrutando del paisaje en este camino por el que va mucha menos gente.
Plantar la semilla es básico para vivir mejor. Veo infelicidad, mucha tristeza y poca ilusión a mi alrededor. En vez de dedicar esas fechas para evadirnos para no sentir todo eso, habitémonos. Estemos en nosotros para poder trascender eso que nos incomoda. Tenemos el poder de hacerlo.
Y vivamos con propósito. Es fundamental. Cuando no tienes un propósito, una misión vital, y decides bajarte de la rueda de hámster en la que vivimos, todo parece desmoronarse. Cualquier cambio en tu vida, como dejar de trabajar por un tiempo, te puede sumergir en el desánimo y el aburrimiento. Y, ¿sabes por qué? porque no tienes propósito. Tenerlo es tener una guía, un foco que te alumbra hacia quien quieres ser. Por eso es imprescindible y maravilloso.
Así que alinéate con diciembre, con todo lo que nos ofrece este mes. Planta tu semilla, enfoca bien tu camino. Sigue. Y no pares. Danza con él y aprovecha que ahora mismo es el momento de hacer esto y que, si lo haces, todo está a tu favor para que se convierta en realidad.
Y si no tienes claro el foco ni tu misión, puedo ayudarte con una lectura de tu carta natal que te aportará claridad. Es un regalo maravilloso que puedes hacerte a ti mismo o a alguien a quien quieras. Hace falta guía y la astrología tiene una respuesta para ti.
Que tengas una increíble semana.